Primera Semana de Clase + Aventura de la Cabra

Buenos días mis lectores,
La semana pasada fue mi primera semana de curso, algo caótica pero al fin y al cabo ordenada. Comencé el lunes con un curso de teatro a las 17h, durante esas 3 horas tuve que hacer contacto físico con mucha gente que no conocía... abrazar, dar la mano... nada peor podía haberme pasado para mi estado de ánimo que tan sensiblemente se hayaba. Aquí van muy a saco, y ya me he tenido que aprender un extracto de una obra de teatro para hoy. Las clases no comienzan con un "esto es lo que vais a tener que hacer para aprobar, hasta mañana". No. Aquí las clases comienzan de verdad.
Una diferencia que me sorprende en comparación con España es que aquí no tienes una clase durante 4 horas semanales, aquí das cada clase una vez al día, una vez a la semana, durante 2 horas, y te despides hasta la semana siguiente. Y es duro. Al principio creía que me iba a perder, ya que tengo curso en un aula que está a 20 minutos (aunque yo tardo 10) andando desde la universidad, y tienes que ir perdiendo el culo para llegar a tiempo. Menos mal que soy Erasmus y a mi me tienen un poquito más en consideración.
El segundo día de clase no paré desde las 8 de la mañana hasta las 18h 30. Al igual que el tercer y el Cuarto día. Viernes libre. Un fin de semana de 3 días... creo que me gusta la idea. Doy asignaturas como traducción, literatura francesa del siglo XVII y varios talleres de teatro para compensar los 30 créditos que en España hacen 5 asignaturas y que aquí hacen 10 o 12.
He conocido en clase a gente, pero solo han conseguido caerme bien una chica de color que ya tiene una nena y que se llama Natasha y otra española (de valladolid, creo) que se llama Fátima y que asiste conmigo a bastantes cursos. Ha sido una semana cuanto menos interesante, me encanta enterarme de todo lo que los profesores dicen, es como en España, doy gracias por que ahora veo que mi universidad me ha instruido muy bien. Mi francés ha mejorado notablemente, aunque creo que no en el acento, sí en el vocabulario y en mejora de expresión.
Fuera de lo que va siendo la universidad ha sido bastante "perfecto", entre comillas, ya que he discutido con gente a la que quiero mucho, y todo por la distancia. En la residencia siempre me voy a cenar al otro edificio en el que tengo a mis amigos. Estas personitas maravillosas que he tenido la oportunidad de conocer en estas 3 semanas casi que llevo aquí, en general sus nombres son:
España: Anaïs, Alicia, Claudia, Natalia (esta vive en otra residencia)
Italianas: Elena, Margherita.
Alemana: Diana.
Franceses: Sandy, Erskine, Arnaud... y muchísima más gente con la que hablo en la cocina y que me caen muy bien como Melanie, Jordan (aunque este es caso a parte).
Los he conocido y me gusta, porque no me hacen sentir tan sola entre estas paredes, ya que la distancia es dura, y tengo unas ganas locas de volver a ver a esas personitas que hacen mi día a día tan especial en España. Por ejemplo, el martes pasado fue la fiesta de integración y bailamos la "zumba" (en realidad era imitar como bailaba una brasileña, todos, absolutamente todos, hicimos el ridículo, pero nos echamos unas risas), el miercoles fue la soirée des crêpes, organizada por Erskine, y de la cual aún tengo un recuerdo en mi dedo índice (maldita sartén ardiendo). Allí conocí a muchísima gente, y, aunque solo comiera un crêpe y luego me muriera de hambre no estuvo nada mal.
Algunas noches nos hemos ido a habitaciones y hemos visto películas con Sandy y Erskine, películas al principio fáciles como Río o Rapunzel (Raiponce), hasta llegar a musicales como Burlesque (de Christina Aguilera y Cher, me encanta).
Tenía tanto miedo de no hacer amigos... por eso, cosas como que puedo llamar a Alicia por telefono, o presentarme en la puerta de Anaïs, o ver que Erskine y Sandy vienen a llamarme a la puerta para ver qué tal estoy, me hace sentir que no estoy tan sola y que la gente cuenta conmigo. Incluso me han regalado un llavero que podéis ver en mi otro blog: Llavero nº87

¡¡Pero españoles míos no os pongáis celosos que a vosotros os quiero mucho y me faltáis aquí!!

Y ahora viene la sesión fotográfica:

Todos sabéis quién soy yo, debajo de mi, Margherita,
a la derecha, de abajo hacia arriba: Natalia, Anaïs, Alicia y Elena.

Sandy (francesa) y yo.

Yo, Erskine y Anaïs.

Aún me faltan fotos con más personas como Claudia, Arnaud, Diana... pero ya las ire subiendo.

¡¡Y ahora la tan anhelada aventura con la cabra!!

Veréis, la noche que salimos a tomar algo al centro subimos en el bus, y Elena puso cara de incredulidad, cuando me giré a ver que sucedía me quedé asombrada... ¡¡UNA CABRA EN EL AUTOBÚS!! Sí, aquí en Tours se pueden subir perros, gatos... pero ¿una cabra? Todo el trayecto estuvimos intentando hacerle fotos, incluso unos chicos (que luego veríamos luego por la calle y dirían "la chèvre la chèvre") se apartaban para que pudieramos fotografiarla, pero como el autobús se movía no pudimos hacerlo.
Bueno, pues al bajar del autobús, con nuestro inigualable morro, le preguntamos al dueño si nos podíamos hacer una foto con ella, lo que pasa es que la cabra se movía y aquello era imposible. Al final el hombre (que iba bastante borracho) me preguntó "¿tienes miedo?" y yo le respondí que no. A lo cual dejaré la foto siguiente como fin de esta historia:

Jamás pensé que en el ERASMUS las cabras fueran tan importantes, hemos creado muchos insultos con cabra y aquí a la gente parece que le hace mucha gracia, por eso incluso saliendo y yendo a ver animalitos me hacen fotos desprevenidas como esta:

En fin, y con esto queridos míos, otra entrada más de esta aventura que estoy viviendo,
Besos,
Lola